¿Cuánto te mide?

Que todo hombre se ha medido la "batuta", al menos una vez en la vida, es tan cierto como que todo ser humano, salvo que alguien sea ciego, miramos el papel mientras nos limpiamos el culo para saber si debemos seguir tirando del rollo de papel higiénico. Claro está que siempre hay un mentiroso que lo niega para colgarse el dudoso título de pudoroso.

Total, os preguntaréis, ¿a qué coño viene esto? Pues para ser sincero a nada en concreto, simplemente me he acordado de un amigo que decía que no se la había medido nunca, pero que curiosamente sabía el total de centímetros de "lomo" que tenía. Y es que a todo hijo de vecino que se precie le gusta quedar por encima de los demás; ya sean amigos, novi@s, compañeros de trabajo, familiares o desconocidos.

Cualquier hombre, no sé si todos ya que excepciones siempre hay, ha tenido una de esas veces en las que queda con sus amigos y, mientras se tiene una conversación animada sobre cualquier tema trivial de turno; (generalmente, el tema de la tía buena de turno que halla salido a la palestra en los medios de comunicación); alguien salta diciendo aquello de; "Pos a mí me mide 30 centímetros". Cualquiera, en su sano juicio, sabe que las posibilidades de que el amigo en cuestión esté diciendo la verdad son prácticamente nulas, sabéis que con todo pronóstico es un mentiroso de "tomo y lomo" (entiéndase el juego de palabras).

Evidentemente, la respuesta por parte del resto del grupo no se hace esperar, y cuando el primer borrego abre la boca no es para llamarle embustero, que va; en su lugar, suelta aquello que reza: "Te gano por dos centímetros". Lo más divertido es saber que todos mentimos como bellacos, a lo que uno siempre acaba soltando aquello de: "Menos mal que en España la media es de 13 centímetros", con la subsiguiente respuesta de: "Pos yo me salgo de la media".

Pero al final todo acaban siendo risas sanas y entre risas se acaba hablando de otra cosa, aunque la duda de quién ha dicho o no la verdad se queda en el aire.