En esta entrada voy a hablar un poquito sobre aquellas personas (entre las que me voy a incluir, por el momento) que sienten la necesidad de dar un giro a su vida por la razón que sea. Estas razones pueden ser varias: un cambio de imagen, un cambio en tus ideales, de pareja, de religión o, porqué no decirlo, de sexo; además de muchas otras que puedan ocurrírsele a uno. No soy profesor, ni tengo pretensión de serlo nunca; por regla general, no los trago.
Muchas veces, cuando nos encontramos en una encrucijada o estamos ante una situación para la que no tenemos una respuesta o forma de actuar que nos funcione como nos gustaría, nos agazapamos en un rincón y tenemos la esperanza de que tarde o temprano la borrasca pasará. El problema surje cuando la tormenta parece no pasar nunca, y simplemente por el hecho de no querer cambiar nuestros principios o nuestra forma de querer ver las cosas, ya sea por pereza o incapacidad, la desesperación comienza a hacerse patente. Es entonces cuando se hace necesario un cambio de actitud que nos lleve hacia un objetivo concreto y que nos libre del chaparrón. Y por supuesto, los cambios son difíciles de hacer, hay que enfrentarse a miedos y dudas constantemente; en algunos casos se fracasa y en otros se acierta. Es normal tener dudas y miedos ante situaciones que escapan a nuestro control, pero aún así siempre hay opciones de hacerlo mejor. Hay tantas cosas que no dependen de nuestra voluntad, sino que vienen porque sí; ante las cuales, lo único que podemos hacer al respecto es adaptarnos.
Yo de momento soy de los que ven llegar el chaparrón y no se apartan, sigo estando agazapado en mi rincón, a pesar de saber que de no actuar acabaré empapado. Pero como algún sabio dijo alguna vez, el primer paso es darse cuenta de ello. Espero que este post ayude a un par de personas que conozco y a las que quiero de maneras distintas.
4 comentarios:
Decidido. Voy cambiar de sexo. De tener poco a tener mucho.
Saludos.
xD
Muy buen comentario.
Ay que ver los tiempos de ahora que nada más son luchas constantemente con uno mismo. El ser humano, necesita esperanzas, ilusiones,necesita creer e imaginar que todo se arreglará, que la tempestad se irá y que vendrá la calma; pues si no, no quiere vivir.
Necesita a veces, creer en una realidad idealizada y en un futuro que poco se asemeja al que de verdad será. O ¿por qué no?
Tal vez todo resida en la confianza y empeño en sí mismo.
Gran parte del esfuerzo que te impulsa a ese cambio ya sea físico o espiritual, en ocasiones, es importante tener un gran apoyo.
Besazos.
Supongo que el ser humano es inconformista por naturaleza. Que le den por saco xD
Publicar un comentario